El Ministerio de Agricultura a través de INDAP continúa apoyando a cientos de familias campesinas de la provincia del Choapa mediante la entrega de bonos productivos y de incentivos del Fondo de Apoyo Inicial (FAI) que en esta oportunidad beneficia a productores pecuarios, agrícolas y apícolas de la comuna de Canela.

Con el propósito de fortalecer las actividades productivas 385 crianceros y agricultores de la comuna cuentan con un incentivo del Fondo de Apoyo Inicial que alcanza los $100 mil y el cual se destinará en la compra de insumos, herramientas, mangueras y materiales de construcción. Por otra parte y, a través del bono productivo de $200 mil se entregó a poyo a 53 familias de Canela para mitigar los efectos de la sequía.

El gobernador de la provincia del Choapa, Patricio Trigo,sostuvo que “estamos dando un respaldo a las familias crianceras y agricultoras que lo han pasado mal por la escasez hídrica. Este es un gobierno que cumple, que le interesa la gente y que va de forma oportuna a la ciudadanía y es por eso que hoy finalizamos en Canela con la distribución de más de mil incentivos FAI y también, estamos entregando los bonos de emergencia de 200 mil pesos y estamos contentos porque la gente hoy lo necesita y que llegue de manera oportuna, para ellos es de vital importancia”.

Por su parte el jefe de INDAP en el Choapa, Christian Álvarez, indicó que “el bono productivo tiene como objetivo fundamental ayudar a paliar la sequía con la compra de forraje, insumos veterinarios o también, fertilizantes y otros insumos que ayuden a la gente de Canela. Quisiera destacar además, que en esta comuna están instalando kit de riego con manejo orgánico lo cual nos tiene muy contentos, porque va en la línea del manejo sustentable”.

Bernardo Leyton, alcalde de Canela, agregó que “estamos muy contentos por esta cantidad de beneficiarios que son más de 385 y lo primero que se demuestra aquí es que tenemos un equipo técnico capaz de levantar esta demanda y  lo segundo, agradecer la disposición de Indap de entregar estos beneficios y en eso, tenemos todo el compromiso para que los usuarios puedan acceder a los instrumentos que disponen para ellos”.

La impresión de los más de 400 campesinos beneficiados

En total 438 agricultores y crianceros recibieron apoyo mediante dos medidas impulsadas, a través de INDAP con el objetivo de ayudarlos a enfrentar la sequía y de potenciar sus labores productivas.

Felisa Castillo es la presidenta de la unidad comunal de crianceros y sobre el apoyo recibido sostuvo que “para nosotros es mucha la importancia de esta ayuda que se está entregando a los crianceros y también a los agricultores. Ya somos más de mil los que hemos recibido bonos y estamos contentos con las autoridades que nos han sabido respaldar y apoyar”.

Con esta entrega masiva en la comuna de Canela, ya son más de 3 mil los productores de la provincia del Choapa que cuentan con el bono por sequía y más de mil quienes recibieron los incentivos del Fondo de Apoyo Inicial FAI.

Buscando fortalecer el trabajo asociativo como uno de los ejes del incremento de la productividad local, se reactivó el trabajo de la Asociación Gremial (A.G.) El Desafío de O´Higgins, 530 kilómetros al sur de Coyhaique, en el extremo sur de la Región de Aysén.

Para constituir la nueva directiva, cerca de 30 productoras y productores efectuaron una votación que dejó a Juan Carlos Muñoz como presidente, Rodolfo Gatica como vicepresidente, Wilson Olivares tesorero y Tomás Ulloa, Adán Muñoz y Nelson Henríquez como primer, segundo y tercer director respectivamente.

Juan Carlos Muñoz recordó que esta organización nació a fines de la década de los 90 y que uno de los principales rubros es la ganadería. “Los lineamientos que trabajamos desde hace algún tiempo y que hay que seguir trabajando, son todo lo que es labores de suelo, mejoramiento genético y aumento del ganado bovino, porque es importante en la región, así que hay que dar fuerte a estas tres áreas principales en la zona”, afirmó.

Nelson Henríquez agregó que uno de los desafíos de corto plazo es gestionar proyectos factibles de postular a entidades como INDAP. “Lo importante es estar en una organización. Nosotros estamos tratando de sacar a la A.G. adelante, unir a la gente y postular a los proyectos, porque con una agrupación se tiene más fuerza para postular a los proyectos que hay en estos momentos”.

En la reunión en Villa O´Higgins el director regional de INDAP, Marcelo Hernández, junto al jefe de Área Mario Fernández, indicó que “la asociatividad es un pilar del trabajo a desarrollar en el período 2014-2018, además de generar mayor acercamiento a los productores aislados, ante la necesidad de diversificar la producción y los servicios silvoagropecuarios con producción de hortalizas y fortalecimiento de los servicios de turismo rural. Para apoyar este proceso se cuenta con un nuevo encargado de Oficina INDAP O´Higgins, el técnico agrícola Cristian Chávez y el jefe técnico Prodesal, médico veterinario Sebastián Monsalve”.

Actualmente en la comuna se desarrolla una Unidad Operativa del Programa de Desarrollo Local, Prodesal, impulsado por INDAP en convenio con la Municipalidad, con 38 productoras y productores que desarrollan, principalmente, el rubro bovino de carne para consumo local y, eventualmente, comercialización extra comunal.

La actividad contó con la presencia de los Directores Regionales de INDAP, Jorge Torres Caballero, y de la Fundación Prodemu, Selena Contreras Lineo, además de la encargada del Seguro Agrícola de la Aseguradora Willis, Fabiola Corrotea Ávalos.

El jefe de Área Arica, Claudio Dinamarca, expuso a los asistentes la ejecución presupuestaria en la región, donde de un presupuesto disponible de  mil 268 millones de pesos y fracción, ya se han ejecutado  705 millones 993 mil pesos, quedando por ejecutar sólo 458 millones de pesos.

Entre los programas con mayor inversión, Dinamarca precisó que se encuentran los créditos de corto plazo, con 700 millones de pesos; los créditos de largo plazo, con 160 millones de pesos; los Servicios de Asesoría Técnica, con 109 millones 83 mil pesos; la ayuda de Emergencia, con 90 millones 641 mil pesos; el Sistema de Incentivos para el Desarrollo Sustentable de los Suelos (Sirsd-s) con 75 millones 475 mil pesos; el Programa de Desarrollo de Inversiones (PDI)  con 48 millones 128 mil pesos; y la inversión en los Programas de Desarrollo Local, donde entre honorarios de técnicos y profesionales e inversiones, suma 73 millones 435 mil pesos.

En la ocasión, además hizo uso de la palabra la Directora Regional de la Fundación Prodemu, quien señaló que se reactivará el programa de Formación de Mujeres Campesinas en convenio con INDAP, el cual fue suspendido el año 2012.

Por último, intervino también la  encargada del Seguro Agrícola de la Aseguradora Willis, Fabiola Corrotea Ávalos, quien habló sobre las ventajas y beneficios de tomar este seguro con subsidio estatal y del INDAP.

Al respecto, puso como ejemplo el caso del aseguramiento de 1 hectárea de tomate conducido en con un rendimiento de 120 toneladas por hectárea en el Valle de Azapa. Para dicho caso, dijo que para un monto asegurado de 18 millones 136 mil pesos, con el subsidio del Comité de Seguro Agrícola (Comsa) y el Programa Especial de Apoyo a la Contratación del Seguro Agrícola (Pacsa) de INDAP, el agricultor asegurado sólo pagará de manera final 141 mil 856 pesos con IVA y 14 mil 788 pesos sin IVA por la cobertura.

La ejecutiva recalcó que en la temporada 2013-2014, se realizaron indemnizaciones por 38 millones 192 mil pesos, por diferentes siniestros en los valles de Lluta y Azapa, para cultivos como pimiento, tomate o maíz, por distintos eventos como helada y viento, helada, viento perjudicial, o lluvia excesiva o extemporánea.

El director regional de INDAP expresó en el CADA que la participación campesina en la discusión del presupuesto por territorios es fundamental para el INDAP, ya que a través de esa sintonía fina con los agricultores, se puede ir trabajando para potenciar los instrumentos y programas que sean necesarios para el fortalecimiento productivo de cada sector. 

El Ministerio de Agricultura, a través de la Fundación de Comunicaciones, Capacitación y Cultura del Agro, (FUCOA) dio inicio a la convocatoria 2014 del concurso literario “Historias de nuestra tierra”, iniciativa que -  desde hace 22 años-  busca  a través de la literatura rescatar las   tradiciones , costumbres , vivencias y leyendas del mundo rural.

El lanzamiento en La Araucanía, realizado en el auditórium de INDAP, fue encabezado por el seremi de agricultura,  Alberto Hofer, con la presencia de los directores regionales de SAG, Eduardo Figueroa, de CONAF, Mario Acuña,  de INDAP, Alex Moenen-Locoz y  los ganadores del concurso del año 2013, en sus tres categorías.

En la oportunidad  Hofer,  junto con reconocer  a los ganadores del certamen pasado,  invitó a participar  en esta nueva convocatoria que estará abierta hasta el 27 de octubre. “Para el Ministerio de agricultura es importante motivar a nuestra gente que vive en el campo, a que se expresen a través de la poesía, la narrativa y el cuento con  sus vivencias, porque es un componente más de la vida rural que,  es tan rica y que no sólo tiene que ver con la productividad y la producción de alimentos,  sino también con rescatar  las costumbres y la cultura”.

La autoridad destacó que este año,  en que se celebra a la Agricultura Familiar,  sólo podrán participar del concurso  quienes residan permanentemente en zonas rurales del país,  desde hace al menos dos años. El objetivo es rescatar trabajos que  reflejen nuestras raíces y costumbres, y dar la oportunidad a nuevos talentos para que se atrevan a participar.

El concurso, que para esta versión, tendrá un jurado único y especializado, entregará importantes premios para los tres primeros lugares a nivel regional y nacional, en las categorías: Historias Campesinas (mayores de 14 años), Me lo Contó Mi Abuelito (menores de 14 años) y Poesía del Mundo Rural (todo participante).

Los ganadores y ganadoras nacionales son invitados a una ceremonia de premiación en Santiago, que incluye alojamiento, alimentación, traslados y paseos por la ciudad. Además, se premiará de forma especial a quienes escriban sobre pueblos originarios, mujer rural, profesor rural  y mitos de Chile.

Para  el niño, Renato González, de Lican Ray,  ganador del primer lugar el 2013 con su cuento “El Culebrón de Martini”,  la experiencia fue inolvidable. “Cuando me avisaron que gané me emocioné, me dieron un premio, fui a  Santiago en avión y  estuve en un hotel. Este año igual voy a participar porque me entretengo escribiendo y me acuerdo de mi abuelita porque ella me contaba estas historias”.

Este tradicional concurso, reúne historias de la vida rural: cuentos, personajes, anécdotas, leyendas, mitos y relatos de la tradición oral que constituyen un rescate y valoración de nuestra identidad, los que son atesorados en el Fondo FUCOA, en el Archivo de Tradiciones Populares y Literatura Oral de la Biblioteca Nacional de Santiago.

Los interesados pueden participar hasta el lunes 27 de octubre de 2014 ingresando  sus trabajos a través de www.concursocuentos.cl o a  Concurso Cuentos, FUCOA, Teatinos 40, piso 5, Santiago. También se pueden entregar en la Seremi de Agricultura y en las Agencias de Áreas de INDAP. 

A punto de tener su primera cosecha de lechugas, en la parcela demostrativa instalada en el sector de La Canelilla en la comuna de Petorca, está la agricultora Katherine Tagle, quien forma parte del proyecto que está llevando adelante el Programa de Desarrollo Local, Prodesal de INDAP en esa comuna.

Se trata de un moderno sistema de riego, de tipo israelí, que tiene entre sus principales características la optimización del recurso hídrico a través de la instalación de riego tecnificado o por goteo y que además contempla el sistema de túnel con malla antiheladas por los constantes eventos de este tipo en el sector.

Este procedimiento funciona impulsando el agua por gravedad proporcionada por las condiciones del terreno o la construcción de una plataforma. Con esto se logra que con sólo mil litros de agua se rieguen de forma eficiente las más de tres mil plantas de hortalizas de esta unidad demostrativa, asegurando con esto el sustento familiar y de paso generando excedentes para la venta.

Y de eso puede dar fe la protagonista de este proyecto, la usuaria Katherine Tagle, quien aún está sorprendida y orgullosa de los excelentes resultados del proyecto: “en realidad es increíble. Jamás pensamos que se podía lograr. Estoy muy contenta. Regamos solo 10 minutos, dos veces a la semana y con eso basta. Son plantas sanas, regadas con agua de pozo, y usamos guano de caballo para fertilizar. Incluso ya nos están preguntando cuándo empezamos a vender”.   

 RECONVERSIÓN

Para el director regional de INDAP, Helmuth Hinrichsen, “esto demuestra que en estas zonas de extrema sequía es posible reconvertir a otros sistemas productivos tan exitosos como el de esta usuaria. Los equipos Prodesal realizan un trabajo extraordinario que permite aplicar recursos en proyectos que permiten fortalecer y dar soluciones concretas a los agricultores, lo que está en el mandato de la presidenta Bachelet por alcanzar la equidad y la justicia social en nuestro campo”. 

Para la implementación de este sistema que tuvo un costo total de casi 600 mil pesos, se contempló entre otras cosas, la instalación de cercos para evitar el daño por conejos, la instalación del sistema Netafim (riego israelí), compra de plantas y semillas y la plantación y siembra de hortalizas tales como lechugas, cebollas, repollo morado, brócoli y arvejas, entre otras.

Para la instalación de este proyecto, que comenzó en mayo de este año, se aprovechó el terreno de 500 metros cuadrados que antes era ocupado por paltos y que tuvieron cien por ciento de pérdidas por efectos de sequia y heladas. 

Deslizamiento de materiales, piedras, barro y embancamientos son los problemas que todos los veranos tenían los agricultores de Santiago de Río Grande con las tormentas y lluvias altiplánicas del período estival. Un situación que empeora la calidad de las aguas y corta su conducción, trayendo consigo la pérdida del riego de los cultivos que permiten el desarrollo agrícola de una de las zonas que se dedica por completo a la agricultura en la región de Antofagasta.

En un diálogo permanente con la comunidad y atendiendo a esta situación es que INDAP acogió la demanda de los agricultores, mejorando los canales matrices en 22 puntos a más de 4000 m.s.n.m. Se trata de tubería HDPE de 375 mm de diámetro revestida en mampostería en piedra, conservando la construcción ancestral del pueblo atacameño, evitando el histórico problema que venían arrastrando cada verano, afectando directamente sus bolsillos y calidad de vida.

La presidenta de la Comunidad Atacameña de Santiago de Río Grande, Juana Anza González, contenta y orgullosa valoró este hecho diciendo que “la fortaleza que tenemos es la cultura y la tradición y eso creo que nunca lo vamos a perder y lo vamos a mantener siempre”. Una construcción de 256 metros lineales que perfeccionará el riego de cultivos de ajos y habas que se comercializan desde Arica a Copiapó, como también la alfalfa para la ganadería camélida existente en el lugar.

La directora de INDAP Región de Antofagasta. Jannette Araya Villarroel, manifestó que “es un orgullo trabajar con una comunidad muy apegada a sus tradiciones que hemos encontrado la fórmula para trabajar”. La autoridad del agro regional agregó que ésta “se basa en la cercanía para poder conjugar lo que es intervenir como institución, incorporando algunas tecnologías, manteniendo sus tradiciones”.

El seremi de Agricultura de la Región de Antofagasta, Jaime Pinto Flores, relevó el trabajo de INDAP, destacando que “nos tiene muy contentos una forma distinta de trabajar con dialogo constante con la comunidad”. Es así que añadió que con esto los servicios “se van interiorizando de las necesidades y proyectos que surgen desde la comunidad para combatir la desigualdad existente en la agricultura regional a través de estas acciones”.

La empresa Concha y Toro trabajará junto 20  productores de uva país del Maule  para asistirlos técnicamente  en todo su proceso productivo, para así darles nuevas oportunidades de desarrollo y  de mejora en el cultivo de sus predios. 

La iniciativa es parte del programa de Alianzas Productivas de INDAP y es resultado del último concurso regional realizado durante el primer semestre del año.

“La Alianza Productiva busca que la empresa privada genere lazos comerciales de mediano y largo plazo con sus proveedores, a través de los cuales se creen beneficios mutuos. Esto es  para la empresa contar con un producto de una calidad asegurada- trazabilidad- y para los agricultores beneficios técnicos y comerciales. Felicito sinceramente a los productores por atreverse a aceptar este desafío y a Concha y Toro por este anhelo de poder ayudarles a progresar con procesos más rápidos y  que mejoren su comercialización” señaló Paulina Tapia, jefa de Fomento INDAP. 

El trabajo  de la empresa contempla un diagnóstico inicial del predio a fin de establecer el plan de trabajo y actividades a realizar. También considera asesoría técnica y de calidad, asesoría técnica en producción primaria y gestión predial y formulación de proyectos de inversión.   No sólo podrán mejorar el volumen de uvas que produzcan sino también  la calidad de la materia prima, su inocuidad, trazabilidad  y la eficiencia del proceso productivo. 

“Consideramos que los productores  de uva son nuestros socios estratégicos, contribuyen con su trabajo y materia prima al espíritu de excelencia y calidad que busca la compañía. Buscamos mantener una relación cercana y un diálogo fluido con ellos mediante relaciones de largo plazo. Esperamos que este programa signifique acompañamiento en su negocio, afiance aún más nuestras buenas relaciones y que traiga a su vez beneficios para toda la comunidad”, señaló Rodrigo Ortúzar, gerente de Compra de Uvas y Vinos.  

Este proyecto se enmarca en la política de Responsabilidad Social de la Empresa Concha y Toro  y se orienta a apoyar y dignificar el cultivo de cepas emblemáticas de Chile.  Principalmente va orientado al trabajo de productores de cepas tradicionales como uva país, utilizada directamente en la elaboración de  Specialties, el más reciente lanzamiento de la línea de vinos Frontera de Concha y Toro.    

En la región del Maule son 68 los convenios de alianzas productivas que INDAP trabaja con 40 empresas de diversos rubros, atendiendo a un total de 2.626 agricultores.

En una ceremonia realizada en la Escuela Agrícola de la comuna de Río Negro, provincia de Osorno, y encabezada por el director regional de INDAP, Enrique Santis, se entregaron los incentivos de inversión a 203 familias pertenecientes a los programas territoriales de la comuna, que atiende el área INDAP Purranque. Recursos que fueron destinados fundamentalmente a la adquisición de motocultores, cercos eléctricos, equipos de ordeña, centrifugas, desbrozadoras y esquiladoras, así como también para el mejoramiento de infraestructura predial que incluyó la construcción de invernaderos, galpones, mangas corrales, bodegas y cobertizos, entre otros, lo que significó una inversión superior a los $133 millones de pesos.

En la oportunidad, el directivo regional destacó la posibilidad de que estas familias puedan mejorar sus labores y su trabajo en el campo a través de potentes inversiones que mejoran la calidad de vida de estos pequeños agricultores. “Sin duda estas inversiones son una inyección potente para mejorar el trabajo en el campo, en una comuna que se destaca por ser principalmente rural y donde tanto el programa Prodesal, como el Programa de Desarrollo Territorial Indígena, PDTI, han potenciado ese trabajo,  y es lo que como institución buscamos, mejorar la calidad de vida de nuestros agricultores. Queremos dar reales oportunidades para que los campesinos se queden en el campo, para que los jóvenes vuelvan a trabajar la tierra y para que las mujeres puedan ser madres y emprendedoras al mismo tiempo. Ese es el compromiso de este Gobierno”, puntualizó Santis.

Por su parte, el alcalde de la comuna, Carlos Schwalm, junto con agradecer el apoyo del INDAP, destacó la importancia que este tipo de inversiones tiene para la comuna y para sus habitantes, destacando el empuje que los campesinos por sacar adelante a sus familias. “Quiero destacar el trabajo mancomunado entre INDAP y el municipio a través de este convenio de colaboración  que nos permite tener tres módulos de Prodesal y dos de PDTI, abarcando la atención de gran parte de nuestros usuarios. Como municipio también queremos ser un aporte a este crecimiento y por eso también estamos trabajando en la implementación de una planta de procesamiento apícola en la localidad de Tres Esteros y otra planta de faenamiento avícola para dar mayores posibilidades a estos rubros en nuestra comuna”, señaló el edil.

En este contexto se financiaron 132 planes de manejo para abrevaderos de emergencia y praderas suplementarias, con el fin de paliar los perjuicios causados por el déficit hídrico en la zona.

“Son medidas que apuntan a mantener la capacidad productiva de la agricultores, ayudándolos en los aspectos más sensibles y necesidades en sus explotaciones agropecuarias”, manifestó el Director Regional de INDAP, Carlos Felipe Vergara.

A través de este concurso del programa de suelos (Sistema de Incentivos para la Sustentabilidad Agroambiental de los Suelos Agropecuarios) los pequeños agricultores pueden acceder a incentivos económicos destinados a cofinanciar hasta el 90% de los costos netos que impliquen las prácticas consideradas como emergencia agrícola. 

Los agricultores beneficiados corresponden a las Areas de INDAP Lolol, Litueche, Marchigue, Santa Cruz, Las Cabras y Rengo.

Es sabido que los productores de quínoa del secano costero de la región de O’Higgins muchas veces destinan su producción a la alimentación animal, en vez de venderlo como producto para el consumo humano.

Además, la falta de metodologías de selección, las malas prácticas agrícolas, la falta de equipamiento de maquinarias procesadoras y los bajos niveles de asociatividad entre los productores han generado rendimientos muy bajos y semillas de poca calidad. Algo preocupante si se considera que son pocos los países productores de este seudo cereal y que en el mercado internacional el quintal de quinua se transa a $95.000, cinco veces  más que el precio de la soya.

Por esta razón  y bajo el marco del proyecto FIC “Tecnologías de innovación para la quinua del Secano” hace algunos días se logró formalizar la constitución de la primera Cooperativa de Productores de Quínoa del Secano Costero de la Región de O'Higgins, con el fin de incentivar la asociatividad entre productores para así mejorar su producción, precio y demanda del grano.

En ese sentido la Intendenta Regional, Morín Contreras, expresó que: “Esta cooperativa es un gran paso para ellos porque les va a permitir obtener recursos del Estado y poder negociar precios por la venta de quinua que será mucho más favorable que si lo trabajan en forma individual”, señaló la máxima autoridad regional.

Por su parte el Seremi de Agricultura, José Guajardo, comentó que: “Estos pequeños productores muchas veces no tienen las herramientas necesarias para despegar. Estamos viendo que en un rubro tan ancestral como es la quinua, con tantos años de historia en Latinoamérica, y que tanto desarrollo le dio a las culturas precolombinas, hoy con un grado de innovación, podemos ver nuevas formas de cultivarlas, protegiendo nuestro medio ambiente y generando una mayor productividad para que puedan ser sustentables”.

Innovadora iniciativa

La Universidad Católica de Valparaíso trabajará con estos productores de quinua del secano costero durante dos años en el proyecto “Tecnologías de innovación para la quinua del Secano”. Esta iniciativa; financiada por el Gobierno Regional de O’Higgins a través del Fondo de Innovación  para la Competitividad; busca establecer y validar nuevas tecnologías para abordar la problemática existente respecto a la obtención del grano de quinua y que se pueda cumplir con los estándares establecidos en el mercado.

Para los profesionales de la Universidad Católica de Valparaíso, este proyecto persigue mejorar el proceso completo del cultivo de quinua, desde la preparación de suelos, hasta su procesamiento antes de la comercialización, apuntando a un trabajo conjunto con los campesinos haciéndolos parte del proceso investigativo y de acción.

La iniciativa también busca promover una producción con denominación de origen, la cual tiene que ver con las prácticas productivas para poder adjudicarla. “Es un proceso complicado y largo en el cual se necesita mucha información, pero nosotros lo vamos a hacer, vamos a postular”, comentó el Coordinador del proyecto, Pablo Olguín

Además, el profesional destacó la aplicación de nuevas tecnologías de procesamiento del grano. “Estamos  trabajando en la implementación de un sistema de localización geográfica de los predios, lo cual permite generar un suministro de información para responder preguntas territoriales. También estamos generando mapas que nos permitan visualizar las áreas donde se puede expandir, las zonas de riego, concentraciones de heladas y un sin fin de variables que podemos ingresar a este sistema y tomar finalmente decisiones”, indicó.

Propiedades

La quínoa es el cereal de mayor y más completa composición en aminoácidos que existen sobre el planeta. Contiene los 20 aminoácidos (incluyendo los 10 esenciales), especialmente la Lisina, que es de vital importancia para el desarrollo de las células del cerebro, los procesos de aprendizaje, memorización y raciocinio, así como para el crecimiento físico. Además aporta fibra y no contiene gluten, por lo que pueden tomarlo las personas celíacas y su fácil digestibilidad los convierte en un reconstituyente por excelencia, ideal para la alimentación de enfermos convalecientes o niños con síntomas de desnutrición crónica.

Las regiones de Tarapacá, Araucanía y O´Higgins, son las tres zonas productoras de quínoa reconocidas en el país, en donde la región de O´Higgins presenta ventajas comparativas por sobre las otras, tales como: que la quinua del lugar  es el único ecotipo existente a nivel del mar y que posee alta adaptabilidad a zonas de secano y escasez hídrica, convirtiendo al secano costero en la zona con mayor potencialidad  en el cultivo de quinua en Chile y con variedades únicas en el mundo.

En ese sentido el Director Regional de INDAP, Carlos Felipe Vergara, cree que sería un gran acierto identificarla con denominación de origen, “porque nuestra quínoa tiene muchas propiedades con alto aporte en proteínas, es un producto de origen vegetal y en el secano costero se dan las condiciones para producirla, siendo una ventaja que la hace más competitiva. Además, con la creación de esta cooperativa los productores podrán enfrentar la negociación de su producto en mejor pie y acceder a servicios del Estado en forma representativa”, comentó.

La importancia de asociarse

Las cooperativas son agrupaciones que poseen como eje central la ayuda mutua entre sus integrantes y por ende deben priorizar el mejoramiento de las condiciones de vida de sus socios, los cuales además poseen igualdad de derechos y obligaciones.

Para el caso de los productores de quinua esta conformación de la cooperativa surge como una alternativa real de desarrollo, permitiéndoles tener un acceso más justo y eficiente al mercado, como también a los fondos públicos vinculados al sector agrícola.

“La necesidad de asociarnos se produce porque no nos llegan los recursos ni las herramientas necesarias. No tenemos la posibilidad de poner nuestra producción directamente en el mercado y por lo tanto las ganancias se las llevan los intermediarios. Con la cooperativa también optaremos a mejorar nuestra tierra y por ende a mejorar nuestra calidad de vida como agricultor”, enfatizó José Ramón Araneda, productor de quínoa del sector Laguna Cáhuil.

Cabe destacar que en esta nueva asociación participarán más de cuarenta productores de quínoa de las comunas de Pichilemu, Paredones, Pumanque y Marchigüe, quienes a través de la formalización de esta cooperativa podrán contar con una planta procesadora de quinua, que está contemplada dentro de unos de los ejes del proyecto.

Se espera que todas estas iniciativas logren atribuir mayor preponderancia al cultivo de la quínoa a nivel local, bajo un sello propio del secano costero así como generar una producción  a  mayor  escala  de  forma  eficiente,  otorgándole  un  valor agregado para su comercialización.

Comunicaciones Intendencia O'Higgins

Los agricultores integran el Programa de Desarrollo Local (Prodesal) de INDAP de la comuna de los “chamantos”, quienes a través del Incentivo de Fortalecimiento Productivo (IFP) pueden acceder a un financiamiento de hasta 1,8 millones de pesos destinado a fortalecer sus actividades productivas.

El Director Regional de INDAP, Carlos Felipe Vergara, y el Alcalde de Doñihue, Boris Acuña, junto al Diputado Felipe Letelier, participaron en la ceremonia de entrega de incentivos económicos a 62 pequeños agricultores de la comuna.

Carmen Allendes, agricultora del sector Lo Miranda, comenta que este incentivo le va ayudar bastante como productora de aves. INDAP le adjudicó recursos no reembolsables por un monto de 500 mil pesos, que usará para construir un gallinero. “Me gustan la gallinas, porque vendo huevos, y esto me ha dado para educar a mis hijos”, precisa.

El Incentivo de Fortalecimiento Productivo que INDAP dispone para los pequeños agricultores de su programa Prodesal, tiene como objetivo financiar inversiones como compra de ganado y sus corrales, cercos, invernaderos, implementos apícolas y la construcción de bodegas.

El Director Regional de INDAP, Carlos Felipe Vergara, felicitó a los agricultores del Prodesal, quienes ponen todo su esfuerzo para sacar adelante sus emprendimientos “y como INDAP estamos dispuestos a brindarles todo el respaldo que necesitan para mejorar su calidad de vida”.

El Alcalde de Doñihue, Boris Acuña, agradeció el compromiso de INDAP para impulsar el programa Prodesal. “Sabemos de la importancia de estos recursos y el impacto que tienen en los pequeños agricultores”, expresó.

Con el objetivo de desarrollar las capacidades técnicas, de gestión, producción y comercialización de los de pequeños productores agrícolas  y sus familias para que puedan mejorar sus ingresos totales, INDAP y el Instituto de Investigaciones Agropecuarias INIA Intihuasi, establecen una alianza estratégica para brindar asesorías especializadas a 25 usuarios hortaliceros del sector de Pan de Azúcar mediante un programa que es único en la región de Coquimbo.

Diego Peralta,  director regional de INDAP, destacó la importancia del Programa piloto de Asesorías Técnicas Locales, denominado PROSAT Hortícola indicando que “es un convenio que da respuesta a las necesidades de los mismos agricultores de tener por un lado el apoyo de INDAP y por otro al INIA en que brinda las asesorías técnicas. En este contexto, se dan soluciones de forma particular y focalizada abordando cada uno de los requerimientos en el ámbito del riego y de la producción básica, entre otros, por tanto nuestra evaluación es que contamos con un buen programa piloto que es a nivel regional y que tiene un real impacto en los pequeños agricultores”.

Una de las labores que se ha desarrollado mediante este programa es que INIA utilice la información generada mediante investigaciones y ensayos de validación para hacer un uso racional de los insumos necesarios para que las plantas crezcan. Por una parte la optimización consiste en medir y monitorear cómo están las poblaciones de los insectos y cuando se tiene la estimación se aplica lo necesario y, la otra parte importante del proyecto “es acompañar durante todo el ciclo al agricultor verificando que se sigue el protocolo que estamos formulando para cada cultivo de acuerdo a las necesidades que cada planta tiene con la meta final de que, a través del uso racional de un manejo optimizado de todos estos insumos el agricultor va a contaminar menos sus suelos y pozos de agua y significa mayor sustentabilidad y si logra la optimización va a tener un ahorro sustancial”, destacó la directora regional del INIA Intihuasi Patricia Larraín.

Un programa piloto que potencia la agricultura en el sector de Pan de Azúcar

Luis Felipe Muñoz, asesor técnico encargado del programa, indicó que el objetivo del primer año “es lograr el mayor número de inversiones en beneficio de los agricultores para acompañarlos en la operación de sus equipos de riego, recomendaciones en fertilización y ponerle las herramientas tecnológicas a disposición de determinar cuál es la demanda real de agua de la planta. Además, vamos a ejecutar días de campo para identificar las brechas reales que tienen en el manejo de herbicidas, por ejemplo, mediante un experto que aborde temas teóricos pero también la práctica y de forma cercana”.

La representante del grupo de hortaliceros beneficiados con esta iniciativa, Olaya Leiva, manifestó estar muy contenta con el programa “porque responde a una demanda que teníamos de recibir apoyo tanto de INDAP como de INIA, ya que necesitábamos de ese trabajo conjunto para mejorar nuestros sistemas productivos”. Asimismo agregó que “hemos recibido asistencia técnica en mejoramiento de fertilizantes y manejo fitosanitario de los cultivos, además de asesoría en riego de acuerdo al sistema que cada uno utiliza que en mi caso es el riego tecnificado”. 

Este convenio busca mejorar los ingresos totales de los campesinos, es decir,  ingresos por venta de excedentes de la producción agrícola y la valoración de la producción que destinan al autoconsumo, a partir principalmente, de la producción silvoagropecuaria y de actividades relacionadas con el ámbito rural, y que pueden ser complementarias a los procesos productivos que desarrollan como el turismo rural y la artesanía, entre otros.