“Logramos salvar nuestra casa, pero el galpón que teníamos se nos quemó por completo, con todo en su interior, y nos quedamos sin nada para el invierno”. Así comienza a relatar su experiencia con los incendios forestales José Aedo, agricultor del sector La Palma en la comuna de Hualqui, Región del Biobío. A tres semanas de esta penosa experiencia, el Ministerio de Agricultura, a través de INDAP, le hizo entrega de un incentivo de financiamiento compensatorio de emergencia por $1 millón para adquirir insumos básicos y materiales para levantar de a poco su sistema productivo.

Como él, otras 100 familias campesinas provenientes de diversas localidades rurales de Hualqui recibieron bonos en una ceremonia desarrollada en Talcamávida, donde estuvieron presentes el director (s) de INDAP Biobío, Juan Francisco Hermosilla y la jefa de la Dirección de Desarrollo Comunitario de la Municipalidad de Hualqui, Alicia Araneda, además de los equipos técnicos y funcionarios de ambas instituciones.

Hermosilla explicó a los agricultores que este incentivo busca paliar en parte las pérdidas sufridas en los siniestros. “Son más de 1.500 familias afectadas en la región y el apoyo que estamos entregando lo aumentaremos de forma gradual, ya que necesitamos catastrar y conocer en detalle las necesidades de cada uno de ustedes; en base a eso, trabajaremos unidos en la elaboración de un Plan de Reactivación Productiva”, apuntó.

Al igual que en Hualqui, en la comuna de Mulchén se entregaron incentivos a siete agricultores de los sectores Alhuelemu y Selva Negra. Ahí la actividad fue encabezada por el jefe del Área INDAP Santa Bárbara, Héctor Villegas, junto a la alcaldesa (s) de Mulchén, Angélica Sanhueza.

En la comuna de Tomé, en tanto, 40 familias campesinas de los sectores Los Quillayes, Lloicura, Chillancito, Loma Alta y Millahue recibieron incentivos en una ceremonia donde participaron el administrador municipal de Tomé, Gustavo Toledo, y la jefa de Fomento de INDAP Biobío, Gloria Cifuentes, entre otros.

Entre los beneficiarios de esta última entrega se encontraba la agricultora Ernestina Aguayo, de Lloicura Bajo, quien valoró el incentivo, ya que le va a permitir reponer materiales de construcción, siembra de papas y un bosque de pinos.

Hasta las comunas de Cauquenes y Chanco llegó el ministro de Agricultura (s), Claudio Ternicier, para encabezar las entregas de apoyos económicos y de forraje a los pequeños agricultores afectados por los incendios forestales.

En total se entregaron cerca de 200 incentivos de un millón de pesos de libre disposición y que se utilizarán principalmente para adquirir insumos y otras urgencias de los pequeños productores, cuyos predios resultaron con diversos daños producto del fuego. Al mismo tiempo se entregó forraje a una veintena de pequeños ganaderos de la comuna de Chanco.

Las actividades contaron con la presencia del subdirector nacional de INDAP, Ricardo Vial; el seremi de Agricultura, Jorge Céspedes; el director de INDAP Maule, Jairo Ibarra; el gobernador de Cauquenes, Gerardo Villagra; la alcaldesa de Chanco, Viviana Díaz, consejeros regionales y concejales de ambas comunas.

El ministro (s) Ternicier explicó que “estos recursos son un primer apoyo, para que los agricultores puedan hacer frente a la emergencia disponiendo de ellos de la mejor forma para mantener en pie sus unidades productivas. Esto no termina acá, vamos a apoyarlos y a evaluar caso a caso su situación para que juntos podamos tener una recuperación de verdad, una recuperación productiva junto a INDAP, y dependiendo de cada caso se asignarán recursos para fortalecer este proceso.”

El subdirector nacional de INDAP, Ricardo Vial, destacó que en el Maule ya se han entregado incentivos casi en la totalidad de las comunas afectadas, proceso que continuará realizándose hasta abarcar la totalidad de pequeños agricultores catastrados como afectados por el fuego. A que “este es un proceso largo y ahora viene la etapa de reconstrucción productiva. Hemos estado desde el primer día entregando forraje junto a los municipios. Ahora, en esta segunda etapa, entregamos este bono que apunta a las necesidades más urgentes, por eso no se rinde, y además estamos generando una tercera etapa, diseñando instrumentos de recuperación productiva para prestar el apoyo de la mejor manera posible”. 

La mostaza negra está presente durante los 365 días del año en los predios agrícolas y sectores urbanos de la comuna de Calama. Así lo han comprobado los agricultores e investigadores del Programa de Control Integrado. En esa línea es que los especialistas recomiendan mantener una metodología de control permanente, durante todo el año, porque sólo de esta forma se puede evitar su crecimiento y proliferación.

En paralelo, los expertos siguen estudiando el comportamiento de la maleza, trabajo que se espera extender por una temporada agrícola más, es decir hasta comienzos del 2018, para dar con un paquete tecnológico que les permita tener todas las herramientas específicas -químicas, mecánicas y culturales- para controlarla.

La planta ha demostrado poseer una potente capacidad de subsistencia durante todas las estaciones, principalmente en las temporadas dispuestas para la producción de maíz, zanahoria, hortalizas y alfalfa. De ahí que los agricultores loínos tendrán que combatirla todo el año, sin tregua, y para eso los especialistas diseñaron un ejemplo de plan anual que tiene la particularidad de combinar tratamientos químico y mecánicos.

Frente al nivel de dispersión actual de la maleza, sumado a su agresividad, la directora de INDAP Antofagasta, Jannette Araya, expresó que “nos hemos visto obligados a considerar productos químicos como una herramienta importante para combatir la maleza y bajar su nivel poblacional. La tendencia que buscamos es que este elemento disminuya su porcentaje de participación en el protocolo de control y manejo hasta que las prácticas agroecológicas y culturales sean más predominantes, generando espacios para la participación de la comunidad”.

La autoridad regional del agro también manifestó que “este nivel de infestación se podría haber controlado antes si las políticas del Gobierno Regional en 2011, cuando fue identificada taxonómicamente la maleza, hubieran priorizado este proyecto como una de sus líneas de trabajo demandada por los agricultores”.

Etapas

El coordinador del Programa de Control Integrado de la Mostaza Negra, que lleva adelante INDAP y que ejecuta el INIA, Lorenzo León, comentó que pese a la agresividad de la maleza existen oportunidades para manejarla y contener su diseminación. “Cuando se cosecha maíz, el agricultor verá que la maleza antes de entrar a otoño rápidamente está rebrotando o está verde, en esa condición se puede ocupar una dosis de herbicida, iniciando un barbecho invernal que tendrá asistencia de técnicos capacitados desde abril 2017. Esa aplicación dará posibilidad de ver un efecto de receso durante los meses de mayo, junio y julio”.

Como segundo consejo, agregó: “en agosto todavía no hay preparación de suelo ni siembras, en este momento es probable que la maleza ya esté presente, por eso esta es una segunda ventana para aplicar un herbicida que hemos comprobado es práctico y no tiene efecto residual que comprometa el éxito del producto que ahí se instalará”.

Según León, en el caso de maíz se utilizará un herbicida que es selectivo y se aplica cuando se tienen dos hojas del futuro choclo, provocando una reacción de supresión de la mostaza, es decir, se tornará amarilla y pasadas una o dos semana  se espera a que el cultivo crezca hasta las cuatro o cinco hojas. En este período la maleza volverá a aparecer, de tal manera que conviene hacer una labor mecánica, utilizando por ejemplo el azadón de rueda.

Hay que destacar que los profesionales del INIA ya han hecho pruebas con diversos químicos y saben cuáles son los que dan mejores resultados. En esta línea están llanos a recibir las consultas de los agricultores para especificar qué producto y en qué dosis utilizarlo.

El Plan Anual contra la Mostaza Negra espera retardar y evitar su propagación dándole ventaja al cultivo para que alcance un nivel de crecimiento que le proporcione sombra a la maleza, y así asegurarse de ganar la batalla a esta infestación.

Hasta el miércoles 1 de marzo se extenderá el plazo para que los agricultores usuarios de INDAP Tarapacá cuyos proyectos no hayan sido preseleccionados en el Concurso Operación Temprana 2017 del Programa Sistema de Incentivos para la Sustentabilidad Agroambiental de los Suelos Agropecuarios (SIRSD-S), por contener observaciones de carácter administrativo, presenten sus apelaciones.

El proceso de apelación se inicia el lunes 20 de febrero y una vez que finalice esta instancia -que contempla un plazo de 10 días corridos- los planes que consigan ser subsanados serán integrados al listado definitivo de seleccionados con financiamiento.

Este instrumento de fomento permite que los pequeños agricultores y agricultoras usuarios de INDAP accedan al cofinanciamiento de hasta el 90% de los costos netos que le signifiquen los insumos, labores y asesorías de formulación y seguimiento requeridos para implementar el mejoramiento productivo de sus suelos.

El proceso de reconsideración permite que los operadores a cargo de la formulación de cada proyecto -en esta convocatoria fueron presentados 268-, una vez informados de los problemas que presentan los planes postulados, reúnan los antecedentes requeridos y los adjunten a una carta de apelación dirigida al director regional de INDAP, Ricardo Huerta Cirano.

La carta de apelación puede ser entregada hasta el 1 de marzo a las 14 horas en la Dirección Regional de INDAP, en calle Patricio Lynch 660, Iquique, o bien en la agencia de Área ubicada en calle 21 de Mayo 418, Pozo Almonte. Ante dudas o consultas, los usuarios pueden dirigirse a las oficinas de INDAP del Programa de Desarrollo Territorial Indígena (PDTI) de cada comuna o llamar a los teléfonos 57 2521905 ó 57 2521909.

Más de 40 productores provenientes de las provincias de Linares (Retiro) y Ñuble (Bulnes, Chillán y Pemuco) asistieron al Día de Campo del Poroto, instancia técnica preparada por investigadores de INIA Quilamapu, en la Región del Biobío, para dar a conocer la información más reciente de manejo para optimizar la producción de esta leguminosa de grano.

En el Campo Experimental Santa Rosa de INIA en Chillán, los organizadores presentaron tres estaciones técnicas en las que se abordaron aspectos de mejoramiento genético, variedades y control de malezas, temas que estuvieron a cargo de Kianyon Tay, Alfonso Valenzuela y Lorenzo León, respectivamente.

Uno de los aspectos que concitó mayor interés de los productores fue la nueva variedad de poroto que INIA lanzará al mercado en el transcurso del año. Al respecto, el encargado del programa de leguminosas de grano de INIA, Kianyon Tay, explicó que “se trata de una variedad de poroto tórtola que destaca por su mayor tolerancia a los virus que afectan actualmente a este tipo de porotos en Chile”. Agregó que “esta nueva variedad reemplazará a la anterior variedad tórtola llamada Torcaza-INIA, que tras 15 años en el mercado ya se encuentra afectada por virus, lo que incide en su rendimiento y calidad de grano”.

El tradicional poroto tórtola Torcaza-INIA tendrá así un reemplazante de mejores características y resistencia a enfermedades, comentó Tay, quien añadió que la obtención de una nueva variedad no es un proceso rápido, toda vez que se requieren alrededor de 10 años de investigación permanente para dar con las características de rendimiento, calibre, características agronómicas y culinarias óptimas.

El poroto en Chile

En nuestro país se siembran unas 13 mil hectáreas de porotos cada año, resaltando como la principal variedad el poroto tipo tórtola, aquel de coloración gris que es el más demandado por los consumidores.

Debido a la presencia de enfermedades que la afectan, esta variedad ha visto disminuidos sus rendimientos en los últimos años, pasando de más de 24 quintales por hectárea a unos 12 ó 14 en la actualidad.

Geográficamente es en la Región del Maule y la parte norte de la Región del Biobío donde se concentra la producción de porotos para grano seco en Chile, alcanzando más del 85% de la superficie cultivada.

Control de malezas

Uno de los factores más complejos de enfrentar por parte de los productores es el de las malezas, que afectan los rendimientos y las ganancias esperadas. Por ello, les resultó muy interesante esn este Día de Campo conocer los ensayos realizados por INIA con diferentes productos químicos para contrarrestar su crecimiento y desarrollo.

También capturó la atención de los agricultores el uso del azadón con rueda, dispositivo empleado principalmente en la agricultura orgánica y que empieza a ser considerado como una alternativa importante para quienes manejan superficies pequeñas (en torno a una hectárea).

Con el objetivo de dar respuesta rápida y oportuna a los pequeños agricultores afectados por los incendios forestales, el Ministerio de Agricultura entregó a través de INDAP bonos compensatorios a 57 familias campesinas de Yumbel y a 59 de Quillón, por un monto total de 116 millones de pesos.

La entrega en Yumbel se realizó en el sector de Paso Hondo y contó con la presencia del alcalde dueño de casa, Juan Cabezas, los diputados Loreto Carvajal y Jorge Sabag, y la gobernadora (s) de Biobío, Graciela Rodríguez.

La Jefa del Área INDAP Yumbel, Yolanda Romero, contó que esta ayuda les permitirá a los usuarios del servicio recuperar infraestructura y adquirir insumos de primera necesidad. “Sabemos que va a ser un proceso lento, pero los vamos a estar acompañando y a partir de marzo comenzaremos con la reactivación de los emprendimientos, evaluando qué es lo más efectivo y eficiente”.

En la sede del sector El Casino en Quillón, en tanto, se realizó la entrega de incentivos a las familias de esta comuna (50) y también de Bulnes (9).

Juan Hermosilla, director (s) de INDAP Biobío, destacó esta segunda etapa de apoyo por parte del Ministerio de Agricultura a los productores damnificados. “Estamos entregando recursos para la adquisición de insumos urgentes, que les permitan de a poco ir regresando a la normalidad; para luego enfrentar la reactivación productiva”.

Nelson Castro, agricultor del sector El Peley, valoró esta ayuda, porque le va a permitir comprar forraje, vitaminas y medicamentos para sus caballos y vacunos que quedaron a mal traer. “También quiero empezar a reconstruir mi invernadero de hortalizas, las que vendía en la feria de Quillón. Esta plata permite volver a empezar con más entusiasmo, porque lo peor ya pasó y ahora hay que levantar la cabeza y seguir”.

Bajo el lema “Con Fuerza de Mujer”, campesinas de las comunas de Angol y Renaico, en la Región de la Araucanía, se organizaron para adherir a la campaña solidaria de recolección de fardos para ir en ayuda de los ganaderos de la zona centro sur del país afectados por los recientes incendios forestales.

En coordinación con la Agencia de Área de INDAP Angol y funcionarias de la Municipalidad de Renaico, ocho pequeñas agricultoras decidieron donar parte de su producción más los aportes de vecinos y lograron reunir un total de 2. 665 fardos. Estos fueron cargados por las propias mujeres en un camión, para demostrar no sólo su fortaleza física, sino también para dejar en claro que el valor de la solidaridad en esa región tiene rostro de campesinas esforzadas y empoderadas.

Este aporte, que se suma a la donación de más de 20 mil fardos y bolos de alimento conservado que han hecho agricultores de todas las comunas de La Araucanía, es una medida de emergencia que busca asegurar la alimentación de los animales hasta que se restablezcan las praderas suplementarias y definitivas que fueron dañadas por los siniestros.

La entrega forma parte de un paquete de medidas de apoyo que dispuso el Gobierno, a través del Ministerio de Agricultura e INDAP, que están dando respuesta oportuna a las demandas más inmediatas de los agricultores, además de recuperar los sistemas productivos de quienes han perdido su patrimonio y principal fuente de ingresos.

Actualmente los funcionarios de INDAP y los equipos técnicos en convenio con los municipios de la región continúan en terreno monitoreando y actualizando la información de las familias afectadas por la catástrofe agrícola. A la fecha se ha entregado alimentación para los animales de 180 familias afectadas de las comunas de Collipulli, Purén, Angol, Lumaco, Traiguén, Galvarino y Chol Chol, y se han enviado unos 38 camiones de ayuda a las regiones del Biobío y El Maule.

Como un gran desafío y una oportunidad para contribuir al desarrollo de la Agricultura Familiar Campesina, calificó Marcelo Herrera Concha su nombramiento como nuevo director regional de INDAP en Valparaíso. En ceremonia de bienvenida, que se realizó en las oficinas del servicio en Quillota, la nueva autoridad destacó que la prioridad de su gestión será fortalecer y afianzar los lineamientos estratégicos en que viene trabajando la institución.    

“Para mí es un orgullo asumir este cargo. Es un desafío y un agrado trabajar para la Agricultura Familiar Campesina en la región, donde me tocó participar en el tema de los recursos hídricos como coordinador regional. Las perspectivas para este período tienen que ver con fortalecer los circuitos cortos de comercialización a través de ferias y mercados campesinos; afianzar el convenio INDAP-GORE que nos permitirá continuar con la rehabilitación de tranques y otros proyectos de riego; y el énfasis en la participación de mujeres y jóvenes en el mundo rural, entre otras temáticas”.  

Agregó Herrera que la unificación de los lineamientos estratégicos de la institución, que apuntan a mejorar la calidad de vida del pequeño agricultor, será la prioridad de su gestión. “Vamos a estar muy coordinados y trabajando en equipo con los jefes de área para consolidar esto que se ha venido haciendo”, aseveró.

Temas hídricos

Marcelo Herrera es ingeniero en Industria Alimentaria de la Universidad Tecnológica Metropolitana (UTEM). Tiene un magíster en Gestión Tecnológica con Énfasis en Biotecnología de la Universidad de Talca, un post-título en Dirección de Empresas de la PUCV y diplomados en Comunicación Organizacional y Liderazgo de la UTEM y Gestión de Calidad y Manejo Sustentable en Agricultura de la PUC.

Se ha desempeñado en asesorías de calidad y producción en empresas de la región y también como gerente de proyectos de fomento de CORFO para la implementación de buenas prácticas agrícolas en empresas de la provincia de Petorca y proyectos agroindustriales. Su cargo más reciente fue el de coordinador regional para los Recursos Hídricos en la región. 

El director nacional de INDAP, Octavio Sotomayor, comentó que “mis expectativas son muy altas. Yo tengo referencias de Marcelo Herrera y sé que es un gran profesional, que hizo un muy buen trabajo en la región vinculado a los temas hídricos y que conoce bien al INDAP y al Ministerio de Agricultura. Estoy confiado en que va a hacer una muy buena labor en lo que queda de este año”. 

Finalmente, el seremi de Agricultura, Ricardo Astorga, destacó la designación y dijo que ya es parte del equipo, está empoderado y conoce perfectamente el mundo rural “Esto significa reforzar el trabajo que está haciendo INDAP y afianzarse más con los demás servicios del agro”.

Reconocimiento a Helmuth Hinrichsen

Las autoridades presentes coincidieron en relevar el rol que cumplió el saliente director Helmuth Hinrichsen, reconociendo el importante aporte que realizó durante su gestión donde una de sus preocupaciones fue el fortalecer los programas de INDAP, en especial en el tema de riego, asociatividad, mujeres y jóvenes, y por otro lado mejorar las relaciones institucionales y con las representaciones campesinas. “Queremos agradecer la contribución de Helmuth en este período donde supo recomponer las confianzas y crear un mejor ambiente laboral”, sostuvo el director Sotomayor.

Dentro de las primeras actividades de Herrera se contempló también una visita protocolar al intendente de la Región de Valparaíso, Gabriel Aldoney, quien le brindó su respaldo en esta nueva función.

El Ministerio de Agricultura, a través de INDAP, concretó la entrega de incentivos compensatorios a 300 familias campesinas afectadas por los incendios forestales en la comuna de Florida, Región del Biobío, de sectores rurales como El Naranjo, Manco, Crucero de Huaro, San Antonio de Cuda, Cancha Los Monteros, La Paz, Poñen, Rahuil, Granerillos, Quilaco y Huaro, entre otros.

La entrega del bono de un millón de pesos por agricultor, que se efectuó en la Escuela Básica de Florida, contó con la presencia del intendente (s) del Biobío, Enrique Inostroza; el alcalde local, Jorge Roa; los seremis de Agricultura, Rodrigo García, y de Economía, Iván Valenzuela; el director regional (s) de INDAP, Juan Francisco Hermosilla, y los beneficiados.

El intendente (s) Inostroza expresó que “en la comuna se realizó un trabajo exhaustivo por parte del municipio en coordinación con INDAP para contar rápidamente con la lista de beneficiarios, a efecto de entregar este financiamiento compensatorio tal como nos pidió la Presidenta Bachelet en su visita a la región”.

Por su parte, el alcalde Roa destacó que esta ayuda permitirá iniciar el proceso de recuperación de suelos y cultivos para que los agricultores se vuelvan a poner de pie. “Ya iniciamos la construcción de las primeras 30 viviendas de emergencia y en el más breve plazo queremos tener listas las 110 que se perdieron en los incendios, además de ir recuperando las 22 mil hectáreas afectadas. Queremos que un plazo máximo de 6 a 8 meses la mayoría de las familias pueda estar habitando sus viviendas definitivas”.

El seremi Rodrigo García dijo que tras la entrega de forraje y de este bono compensatorio para reestablecer la infraestructura dañada, “ahora se dará inicio a la entrega de alimento para las abejas y posteriormente viene una tercera etapa de reactivación productiva, que es a partir de marzo y que se hará en conjunto con los agricultores”.

Juan Francisco Hermosilla, director (s) de INDAP Biobío informó que de acuerdo al catastro hecho en la región, hay 1.504 familias campesinas damnificadas en 19 comunas. “Sólo en Florida se han entregado 313 millones de pesos en bonos compensatorios, además de 120 toneladas de alimento concentrado y 250 bolos de silos donados por agricultores de la zona”.

Hermosilla agradeció públicamente la labor de los funcionarios de todas las agencias de área que trabajaron haciendo frente a la catástrofe, así como a los equipos técnicos, “pues sin el apoyo de ellos habría sido imposible realizar las entregas, los catastros y las coordinaciones para recibir las donaciones. 

Con el objetivo de entregar rápido apoyo a los agricultores cuyos canales fueron afectados con los recientes aluviones ocurridos en la zona, el Gobierno Regional de Atacama puso a disposición de los regantes de Alto del Carmen 200 millones de pesos través de un concurso de obras de emergencia, inserto en un convenio conjunto con la Comisión Nacional de Riego (CNR).

“De esta forma estamos cumpliendo con el compromiso asumido con los agricultores tras recorrer la zona afectada, mandatados por el ministro de Agricultura, donde trabajamos en conjunto con todos los servicios del agro y el Gobierno Regional”, dijo la secretaria ejecutiva de la CNR, María Loreto Mery.

El coordinador de la Macro Región Norte de la CNR, Álvaro Isla, informó que tras los aluviones en Alto del Carmen los servicios del agro constataron los daños para determinar la forma de trabajo. Uno de los puntos principales fue recuperar rápidamente la infraestructura de riego para que el agua pudiera llegar a los predios, para lo cual se dispuso este concurso especial, que permitirá rehabilitar los canales sólo con movimiento de tierra y uso de maquinaria.

La seremi de Agricultura de Atacama, Patricia Olivares, apuntó que se levantó un catastro cercano a los cien canales y se extendió un certificado para el inicio de obras en forma anticipadas. Al día de hoy ya hay 30 canales que están siendo intervenidos, por lo que el concurso que cierra el 23 de este mes permitirá que se entreguen los recursos apenas los proyectos estén recepcionados.

Este llamado está dirigido a iniciativas de pequeños productores INDAP, pequeños empresarios agrícolas, empresarios medianos, organizaciones de pequeños usuarios de INDAP, organizaciones de usuarios en vías de constitución o constituidas y organizaciones de hecho (comunidades de aguas no organizadas, grupos de usuarios de comunidades de aguas no organizadas), que tengan por propósito la rehabilitación de canales afectados por los aluviones registrados en enero de 2017 en Atacama. Los proyectos se deben presentar únicamente a través de la página www.cnr.gob.cl, donde ya están publicadas las bases.                           

Entre los antecedentes que se deben presentar en los proyectos se encuentra el Certificado de Daños Aluvión 2017 suscrito por profesionales de los servicios del Ministerio de Agricultura, documento que deberá incluir los costos y la descripción de las labores, obras y equipos necesarios para la rehabilitación de los canales y la fecha de inicio de obras (cuando éstas hayan sido iniciadas anticipadamente). 

El día en que el incendio forestal tuvo su mayor intensidad en el sector Pailimo de la comuna de Marchigüe, en la Región de O’Higgins, el agricultor, ganadero y dirigente campesino Orlando Cabezas decidió abrir su siembra de quínoa para resguardar sus ovejas y las de un vecino. Los animales pasaron la noche en el lugar, donde estuvieron protegidos de las llamas y con alimento suficiente.

Si bien el fuego causó estragos en su bosque de pinos y eucaliptos, sus siembras y animales se salvaron y hoy le dan aliento para seguir adelante. Tanto así, que se convirtió en el motor de la recuperación de su comuna. Por él pasó la distribución de fardos y sacos de forraje, pues es el que mejor conoce a sus pares. Sabe cuál es el rubro de cada uno y se ha dedicado a coordinarlos desde el incendio. Para muchos es el que permitió que muchos hogares se salvaran y las pérdidas en animales disminuyeran. Sus pocas máquinas las puso al servicio de su localidad, haciéndose cargo del reparto.

Cabezas es un hombre luchador, que siempre ha buscado innovar y ha tenido resultados exitosos. Transcurría 1999 cuando se le ocurrió probar con el cultivo de arándanos. “Fuimos los primeros que trajimos el arándano a esta región, con un grupo de agricultores que yo junté en el sector”, cuenta Cabezas. El berry, que ya iba en crecimiento por ese entonces, se transformó en un éxito y actualmente la agrupación de productores cuenta con un packing donde seleccionan y embalan el producto para su venta. Además, abastecen a las mujeres de la zona que lo comercializan junto a otros frutos secos.

Pero la inquietud por innovar estaba en su ADN. Un par de años más tarde decidió probar con la quínoa. “Yo la cosecho, la guardo y la voy pelando de acuerdo a cómo la vaya vendiendo. Tengo para todo el año”, cuenta. Hoy, con otros tres agricultores de la región, es parte de un estudio que realizan investigadores de la Universidad Católica de Valparaíso para mejorar la semilla.  

Aunque la quínoa evoca inevitablemente el Altiplano, en la actualidad la Región de O’Higgins tiene la mayor producción a nivel nacional, con alrededor de 700 hectáreas plantadas que producen entre 1.000 y 3.000 kilos por ha.

Como si fuera poco, Orlando Cabezas también ha incursionado en el rubro de la ganadería ovina y fue seleccionado para participar en un ensayo de un grupo de investigadores de Nueva Zelanda que busca mejorar la producción de carne. De esta forma, recibirá asesoría exclusiva también en este tema.

Si hay algo que tiene claro este agricultor es que así como le ha ido bien en sus proyectos, también tiene que saber retribuir de alguna forma a su entorno. Fue por eso que no dudo en compartir el terreno donde tenía sembrada la quínoa con las ovejas de su vecino; también regala la lana de sus ovejas a la agrupación de mujeres a la que pertenece su esposa y, tras el incendio, coordinó junto a INDAP la entrega de bolos de forraje a otros campesinos afectados de Pailimo.