VENTAJAS Y DESAFÍOS DE LA AGRICULTURA MAGALLÁNICA

Columna del Director Regional de INDAP de la región de Magallanes y Antártica chilena, Víctor Vargas.

Autor: Indap

Magallanes

Hoy, desde el confín más prístino del planeta, asumimos el desafío de entusiasmar a la comunidad con el encanto de nuestros productos naturales.  Estamos convencidos que la agricultura familiar es un sector fundamental para la economía del país y el desarrollo regional.  Y lo hacemos con una política pública clara y con instrumentos de fomento y líneas de financiamiento potentes.

La Presidenta anunció un programa nacional de comercialización que contempla la creación del sello “Producto Campesino”, esta iniciativa busca diferenciar los productos de la agricultura familiar frente a la hiper oferta que se expresa en los supermercados, las tiendas y restaurantes, las ferias y otros canales comerciales. 

En este sentido, nosotros ya tenemos ventajas naturales. Hay un sabor, sanidad e inocuidad de nuestros productos que ya le dan una identidad propia.  Pero debemos agregar más ciencia, información y recursos en el desarrollo del mercado doméstico, aplicando, por ejemplo, criterios de sustentabilidad en la producción.

Por otro lado, la singularidad de nuestro territorio facilita lo que desde INDAP hemos denominado circuitos cortos, es decir, cadenas comerciales donde se conecte al productor con el consumidor, saltándose al intermediario. Y para avanzar vamos a establecer un sistema que promueva y apoye la incorporación de productos de la agricultura familiar en los Mercados Públicos. Queremos que organismos como la JUNAEB, la Red de Hospitales o las Fuerzas Armadas adquieran productos de la agricultura familiar de la Región de Magallanes.

Para implementar estas iniciativas comerciales necesitamos organizaciones económicas capaces de resolver los problemas de escala que restringen las posibilidades de la agricultura familiar y para fortalecer la participación ciudadana de este sector necesitamos organizaciones gremiales sólidas y fuertes.  Felicito a la cooperativa de Puerto Natales, Campo de Hielo Sur, ellos están demostrando que la unidad y el trabajo colectivo siempre son la mejor cosecha para el futuro mejor.

Estoy convencido que en este gobierno, más que en ningún otro, están dadas las condiciones para sentar las bases de una estrategia que nos permita profundamente avanzar y emparejar la brecha de desigualdad.  Un desafío posible, porque hay un liderazgo claro, potente y generoso, el de la Presidenta Michelle Bachelet.

Pero también se hace necesario la puesta en común de recursos y prioridades, un trabajo mancomunado con el Gobierno Regional, los municipios, los actores sociales, las organizaciones y los privados. Aquí nadie sobra, todos son imprescindibles y el motor de desarrollo es el diálogo. Y me refiero a un diálogo honesto, con respeto, construyendo desde lo colectivo el sueño que nos identifique.