Santiago Rojas: “Estamos en un proceso de transición hacia una agricultura más sostenible”
Autor: Julio Díaz
Nacional Programas Eje Riego Sustentabilidad y adaptación al cambio climaticoDesde su creación, el 27 de noviembre de 1962, en el marco de la primera ley de reforma agraria (15.020) promulgada por el gobierno de Jorge Alessandri Rodríguez, período con altos índices de pobreza, desnutrición y analfabetismo, especialmente en zonas rurales, donde vivía un tercio de la población, el Instituto de Desarrollo Agropecuario (Indap) ha tenido numerosas transformaciones, a la par con la realidad social que ha vivido el país.
Así lo reseña Santiago Rojas, director nacional de la institución que este domingo cumple 60 años de vida: “El proceso de cambio en la tenencia de la tierra en un inicio fue lento y se aceleró durante el gobierno de Frei Montalva, que dicta la Ley de Sindicación Campesina (16.625) y amplía la de Reforma Agraria (16.640) para darles derechos laborales y dignidad a los campesinos y campesinas. Luego, con Allende, se acelera la producción y se crean asentamientos y cooperativas, proceso que se vio truncado por la dictadura, que significó un freno en esta agenda”.
“Con el retorno a la democracia –agrega– se produce un auge transformador; se crean importantes programas, como los de Desarrollo Local (Prodesal), de Desarrollo Territorial Indígena (PDTI) y de Mujeres Rurales que están vigentes hasta el día de hoy; se reanuda el trabajo participativo con las organizaciones campesinas y se avanza en comercialización”.
Hoy los desafíos son nuevos, según Rojas: “Estamos en una crisis climática, de contaminación y de biodiversidad que afecta a los ecosistemas, pero principalmente a nosotros, los seres humanos. En este contexto tenemos que preguntarnos cómo queremos hacer agricultura para el mañana, y por eso como Indap estamos en un proceso que hemos denominado de transición hacia una agricultura más sostenible”.
En los ocho meses que lleva al frente de INDAP, donde ha podido recorrer varias regiones, Rojas dice que las mayores fortalezas que ha visto en la Agricultura Familiar Campesina son su compromiso por alimentar al país y su resiliencia, la capacidad de producir pese a las adversas situaciones económicas o los desastres socionaturales como heladas y sequías. “Siempre siguen poniéndole el hombro”, afirma.
Sus debilidades, agrega, tienen que ver más con temas de equidad en el desarrollo territorial y con su postergación en las políticas públicas. “En lo estrictamente agrícola, las mayores brechas están en la distancia de los centros de consumo, la alfabetización digital y financiera, y una mejora de sus capacidades”, apunta.
Frente a la crisis hídrica, el directivo señala que la institución está impulsando la regularización de los derechos de agua de sus usuarios y usuarias para dar cumplimiento al nuevo Código de Aguas y también se encuentra revisando sus programas de riego, para hacerlos más flexibles. “No se trata solo de hacer obras de riego, hay un tema sistémico con el agua que tiene que ver con el trabajo predial, el manejo de cuencas, la búsqueda de cultivos que se adapten mejor a la sequía, cómo hacer infiltración y aumentar la materia orgánica de los suelos. Debemos adaptarnos a los cambios del clima y avanzar hacia la producción de más alimentos con menos agua”, afirma.
Otro lineamiento del servicio y el Ministerio de Agricultura, por mandato del Presidente Gabriel Boric, es el de la soberanía para la seguridad alimentaria. Por esa razón, anunció Rojas, Indap creará el próximo año un programa de fomento de cultivos tradicionales para apoyar la producción de arroz, trigo, avena, maíz, papa y legumbres.
Sobre el camino andado durante estos ocho meses de gestión, el director nacional de Indap resaltó el Proceso de Planificación Estratégica Participativa para, en conjunto con campesinos, consultores y extensionistas, definir una hoja de ruta con enfoque territorial; y también un fuerte impulso a la comercialización a través de los Mercados Campesinos (165 estables de aquí a fin de año) y las ExpoMundoRural.
“Hoy también estamos avanzando para transversalizar el enfoque de género en todos nuestros programas y en la cultura interna, y reformulando programas para que los jóvenes se queden en el campo y asegurar la producción de alimentos para Chile”, concluye Rojas.