PUEBLOS ORIGINARIOS DE ATACAMA REIVINDICAN SU CULTURA ANCESTRAL

Investigador boliviano compartió su trabajo sobre elementos comunes que convocan una gran territorio entre Bolivia, Argentina y Chile.

Autor: Indap

Atacama

Un largo recorrido por las comunidades indígenas de Atacama realizó durante la semana el sociólogo e investigador boliviano, Freddy Tarcaya, con el objetivo de compartir su trabajo en torno a las coincidencias y similitudes entre la Nación Chichas -en Bolivia- y las comunidades Diaguita y Colla, propias del territorio nacional.

El autor, en su obra, desafía la llamada "historia oficial" contada a través de la dominación incaica y española sobre parcialidades o culturas que habitaban el sur de Bolivia, el norte de Argentina y el territorio comprendido entre la las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta y Atacama de Chile, quienes tuvieron -y continúan teniendo- formas de organización, cosmovisión, territorio y cultura similar.

Comunidades

La sede de la comunidad Colla de Diego de Almagro fue el espacio donde estudiantes y algunos representantes de este pueblo dialogaron sobre puntos de encuentros entre las etnias que hoy gozan de ricas tradiciones milenarias. Es el caso de Yesenia Plaza, una joven de cuarto medio del liceo Manuel Magalhaes Medling de esa comuna.

"Yo, en lo particular, me imaginaba este encuentro como una clase de historia más, pero a través de las palabras del señor Tarcaya me di cuenta del inmenso tesoro que las comunidades indígenas y agrícolas en nuestra región", expresó la estudiante.

Y es que una idea que le atrae a Yesenia es ayudar en el futuro a comunidades indígenas de su comuna. "Espero capacitarme y estudiar psicopedagogía y, de esa forma, ayudar a niños y niñas en su desarrollo desde la educación incorporando sus saberes y tradiciones", expresó.

Domingo Villegas, cacique de la Comunidad Diaguita y agricultor en Canto del Agua, señaló que la visita del sociólogo se transformó "en algo sumamente provechoso para el trabajo que venimos haciendo con la comunidad en torno a nuestras tradiciones, pero también a cómo estamos trabajando la tierra como agricultores.

El poblador agregó que los pueblos originarios "milenariamente eran agricultores y hemos descubierto muchos puntos en común. Por ejemplo, apellidos como Tamblay, Liquitay, y especies arbóreas como el churqui y el patay -algarrobo para nosotros- y la "choronga", que es una vaina de uso textil y culinario en nuestro territorio. Todos ellos están presentes y plenamente vigentes en la exposición de este investigador".

En tanto, Giovana Paredes, integrante de la comunidad Diaguita Sierra de Huachacán, en San Félix, sostuvo que "uno muchas veces piensa que los territorios y lo que sucede en su interior son autárquicos en su modo de vida, autosuficientes, pero vemos que nuestra identidad es compartida en varias singularidades por otras naciones y eso nos abre la mirada para seguir organizándonos, y el día de mañana viajar a Bolivia o Argentina a conocer y empaparse de la forma cómo riegan, cómo hacen agricultura, cómo viven su cosmovisión".

Sin embargo, Paredes indicó que "estoy segura que este es un primer y muy importante paso para que el diálogo se dé entre todos los hermanos indígenas".

Historia oficial

Kunza: el idioma de la Nación Chichas, es el nombre de la obra que Freddy Tarcaya propone en esta investigación de casi tres años que realizó junto a un grupo de colaboradores en Bolivia, específicamente en Tupiza, su pueblo natal ubicado al sur de ese país, cuya hipótesis ahonda en las huellas del idioma histórico del pueblo de los Chichas descritos como un aguerrido y valiente pueblo preincaico que hoy vuelve a decir presente en la construcción de la cultura en una diversidad de pueblos o naciones, como los Atacama de Chile.

El libro se presentó en la Sala de Cámara de Copiapó y contó con la participación de dirigentes, autoridades y comuneros indígenas que fueron visitados por el sociólogo chicheño.

"Fundamentalmente existen varios documentos que dan cuenta de nombres propios de lugares, denominaciones, fonemas y palabras en Argentina, Bolivia y Chile que están vigentes y creemos que estos documentos demuestran la diversidad y riqueza, tanto en la extensión geográfica -desde el chaco boliviano hasta las costas de los Atacama en Chile-, como varios de estos elementos etimológicos, culturales y religiosos son compartidos por las parcialidades en todo este territorio", señaló el autor del libro.

En este sentido, para el director regional de Indap, Leonardo Gros, "tenemos que pensar que estamos debatiendo temas como nación en Chile de no más de 200 años de antigüedad, en tanto que los pueblos originarios vienen hablando de temas con una data de dos o tres mil años. Por ello que creemos importante destacar este hecho como el primer paso de varias conversaciones que estamos haciendo para poner en valor dichas tradiciones, prácticas, idiomas, desde la perspectiva del desarrollo rural inclusivo en nuestro país".

Por su parte, el doctor en Historia, Guillermo Cortés, destacó que para la comunidad académica y científica esta obra "es una entrega invaluable de conocimientos para el desarrollo y la formación de una historia que integre y que sea espejo de toda una variedad de elementos que tenemos en común, como por ejemplo, con la Nación Chichas en Bolivia. Esta es una obra reveladora, de una sana provocación y con alta dosis subversiva de la concepción homogeneizadora que tuvo el imperio incaico en América".