Indap Biobío busca fortalecer el turismo rural de Isla Mocha: Historia, alojamiento y gastronomía

Autor: Milena Lister

Zona Sur Turismo Rural Biobío
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Con una hermosa variedad de bosques de árboles nativos y playas cristalinas, Isla Mocha, ubicada frente a las costas de la provincia de Arauco, se posiciona como uno de los atractivos turísticos más llamativos de la Región del Biobío. Para llegar, una de las alternativas más rápidas es el servicio de avioneta, desde Cañete o Tirúa.

Los cerca de 800 habitantes de la isla se dedican principalmente a la pesca, el turismo, la agricultura y la ganadería. Actualmente el Programa de Desarrollo Local (Prodesal), que se ejecuta en convenio entre el municipio de Lebu e INDAP, apoya a 114 productores con asesoría técnica e inversiones. Además, como usuarios del servicio del agro pueden solicitar créditos para proyectos de gestión predial, infraestructura agrícola y mecanización.

En este contexto, el director de INDAP Biobío, Odín Vallejos, visitó por cuarta vez la Isla Mocha para evaluar en terreno los avances de los programas de la institución y reunirse con agrupaciones de ganaderos, agricultores, artesanos y juntas de vecinos. “Tras conversar con agricultores, dirigentes y el equipo técnico del Prodesal en la isla pudimos visualizar cómo la pandemia ha afectado el fortalecimiento de los rubros, en especial el turismo rural”, indicó.

Agregó que “nuestro desafío hoy como institución es volver a posicionar el turismo rural de la Isla Mocha con toda su historia, leyendas, circuitos de interés, gastronomía y alojamiento, dándolo a conocer a la región y al país como una alternativa diferente a cargo de usuarios de INDAP Biobío”.

Entre los atractivos que se pueden conocer se encuentran las emanaciones de gas natural al sur de la isla, que bañan la superficie del agua y que pueden ser encendidas con antorchas a cualquier hora, mañana, tarde o noche. Experiencia única e inolvidable que no se repite en ningún otro lugar del país y que puede ser complementada con cabalgatas, visitas a la playa y recolección de productos del mar.

Luis Astete, emprendedor turístico, pescador, agricultor y usuario del Prodesal, contó que a través de su emprendimiento familiar Isla Mocha Punta Sur ofrece esta maravillosa experiencia de “llamas sobre el mar” y todo tipo de actividades y servicios para el visitante. “Incluimos los traslados desde el aeródromo, alojamiento, gastronomía, cabalgatas, tour por senderos de la isla y las emanaciones de gas en el mar, que permiten a los visitantes vivir una experiencia inolvidable en un entorno privilegiado”, aseguró.

Otro punto para disfrutar en familia es el camping Tía Peta, que cuenta con un amplio lugar para acampar, con comedores y baños por $5.000 por persona. “Todo esto puede ser complementado con arriendo de bicicletas, compra de pan amasado, huevitos de campo y verduras de temporada, en un hermoso entorno de tranquilidad y playas”, dijo su dueño, Juan Guzmán.

En otro sector de la isla, María Valenzuela, artesana de conchitas de mar y lana, ofrece una gran variedad de artículos para los turistas. “Llevo años trabajando la artesanía y a los visitantes les gustan porque siempre vuelven a mi negocio que se ubica en la parcela 4”.

Otro de los atractivos del territorio es la Reserva Isla Mocha, creada en 1988. Cuenta con diversos senderos rodeados de hermosos paisajes, en una superficie de 2.200 hectáreas administradas por la Corporación Nacional Forestal (Conaf).

Uno de los guardaparques del lugar, Francisco Astete, detalló que "la reserva cuenta con bosques centenarios, con predominio de olivillos, arrayanes y laureles. También hay especies endémicas, como la fardela blanca, especie migratoria-pelágica que sólo se encuentra acá y en la Isla Juan Fernández".

Con una superficie cercana a los 48 kilómetros cuadrados, Isla Mocha está llena de aventura, con un rico tesoro cultural y natural para visitar en la Región del Biobío.