Con deseos de más participación y talleres sesionaron en Pozo Almonte jóvenes rurales de Tarapacá
Autor: Gustavo Leal
Norte Grande Programas Eje Tarapacá
En un significativo avance para el desarrollo agrícola regional, se llevó a cabo en la Agencia de Área Pozo Almonte de INDAP la primera sesión del año de la Mesa de Jóvenes Rurales de Tarapacá, que busca marcar la hoja de ruta para el fortalecimiento del sector agrícola juvenil de la zona.
La actividad, enmarcada en la Estrategia INDAP 2023-2030, reunió a las nuevas generaciones de agricultores de diversas localidades de la región y tuvo una significativa participación, considerando las dificultades geográficas y las extensas distancias entre las localidades. El encuentro se centró en establecer las bases para un plan de trabajo anual que permita robustecer la presencia juvenil en el agro regional.
Edwin Chino, presidente de la Mesa de Jóvenes Rurales de Tarapacá, expresó su satisfacción por la significativa asistencia y enfatizó la importancia de la agroecología y la diversificación productiva. "Estamos enfocados en desarrollar una agricultura sostenible y mostrar que en el norte también se puede producir de manera agroecológica y orgánica", dijo, invitando a otros jóvenes a sumarse a este espacio de encuentro que impulsa INDAP.
El jefe de la Agencia de Área Pozo Almonte, Carlos Bugueño, destacó la necesidad de fortalecer el vínculo entre los jóvenes y el sector productivo, mientras que Humberto Zavala, encargado del Programa de Desarrollo Territorial Indígena (PDTI), subrayó la importancia de organizar un plan de trabajo que contemple capacitaciones y actividades relevantes para los participantes.
Entre los principales desafíos identificados, desde la opinión de los jóvenes, destaca el deseo de acceso a recursos hídricos, la conectividad entre localidades, la necesidad de atraer y retener a más jóvenes en el sector agrícola, una mayor participación y más talleres de capacitaciones para este segmento.
La Mesa de Jóvenes Rurales representa un paso estratégico para enfrentar el envejecimiento del sector agrícola, donde la edad promedio de los usuarios de INDAP es de 65 años. La participación activa de jóvenes agricultores no solo garantiza la continuidad de la actividad agrícola en la región, sino que también introduce nuevas perspectivas y tecnologías para hacer frente a los desafíos específicos de la agricultura en zonas desérticas.
Para los jóvenes, la consolidación de esta mesa aparece como una oportunidad única para articular sus necesidades con los instrumentos de fomento disponibles, permitiendo desarrollar una agricultura más resiliente y adaptada a las condiciones locales.
Al término de la reunión, tanto los profesionales de INDAP como los jóvenes coincidieron en que espacios como estos dependerán del compromiso institucional y el protagonismo que asuman los jóvenes en la construcción de su futuro en el agro. Entre los desafíos se plantearon también cómo organizarse y asociarse mejor, para tener mayor presencia en las decisiones que la autoridad toma para definir presupuestos para su segmento y en específico para la agricultura juvenil en Tarapacá.