Artesano de Quilpué Sergio García renace de las cenizas con sus instrumentos musicales de cerámica

Autor: Patricia Espina

Zona Central Mercado Turismo Rural Valparaíso
Artesano Sergio García - instrumentos de cerámica 1

En un abrir y cerrar de ojos, el destacado artesano quilpueíno Sergio García Fariña (76), quien se dedica a la fabricación de instrumentos musicales en cerámica y al rescate de instrumentos precolombinos como la ocarina, perdió 40 años de trabajo y dedicación: el 13 de febrero de 2020, un voraz incendio arrasó con su taller y con lo que había en su interior.

Todo fue consumido por las llamas, desde su preciado horno para la cocción de las piezas de arcilla hasta los moldes de diversos instrumentos que van desde las flautas, sonajas, vasijas silbadoras, darbukas y udus hasta la ocarina con todas sus variantes: transversal, colgante y en línea.

El siniestro ocurrió pocos meses después del estallido social de octubre de 2019 y justo previo a la llegada de la pandemia de coronavirus a Chile. Pese a este difícil escenario, este artesano, junto a su socio Marco Antonio Donoso, con quien tiene la empresa “Arcoiris”, no se amilanó y lejos de perder la esperanza echó mano a su optimismo para volver a empezar, con la convicción de que sus manos volverían a transformar la arcilla en hermosas piezas de arte.

“Cuando llegamos hace cuatro décadas a este lugar lo hicimos sin nada y ahora, tras este trágico evento, dijimos que así como llegamos nos íbamos a tener que levantar. La ayuda llegó muy rápido con el apoyo de buenos amigos y la familia. Uno de ellos nos trajo camionadas de pallets. También tuvimos apoyo económico de clientes y otro amigo carpintero nos construyó el taller. Trabajamos todo el 2020 y 2021 para alcanzar nuestro objetivo de ponernos de pie”, cuenta García.

Apoyo de INDAP

En el proceso de echar a andar nuevamente la producción de sus invaluables piezas de cerámica, el apoyo de INDAP a través del Programa de Asesorías Técnicas (SAT) de Turismo Rural y Artesanías jugó un rol fundamental. En 2021 postularon a un proyecto que les permitió adjudicarse un nuevo horno y otros implementos tales como pesa digital, esmeril de banco y afinador de instrumentos.

Artesano Sergio García - instrumentos de cerámica 2

 

“Recurrimos a INDAP por el horno, que es más grande, puede alcanzar una temperatura de 1.300 grados y cuece arcilla, loza y porcelana. Es superior al que teníamos. Al mismo tiempo recuperamos otros elementos perdidos”, precisa el artesano, que ya está trabajando en nuevos proyectos, entre ellos la reconstrucción de un udú, instrumento de percusión de origen nigeriano que se usa en diversos estilos musicales, que se perdió en el incendio.

Otro de los proyectos que García y su socio tienen en mente es poder integrar el uso de la ocarina en los colegios de la zona, que los niños se familiaricen con ella y reemplacen la flauta dulce por este instrumento precolombino. “Además, pretendemos en un futuro cercano compartir nuestro conocimiento a través de talleres para todos los interesados”, agrega.

“Estos artesanos se han destacado por la calidad de su trabajo, el que ha sido reconocido a nivel internacional. Los hemos apoyado en su trabajo productivo a través de nuestros programas e instrumentos con la implementación para el taller y la participación en diferentes ferias y muestras. Hoy el objetivo es seguir potenciando estos emprendimientos que permiten rescatar tradiciones y costumbres ancestrales de nuestros pueblos”, expresó Sebastián Bulo, encargado de Turismo Rural y Artesanías de INDAP Valparaíso.

Ocarinas de Sergio García

 

Sergio García Fariña se dedica desde 1975 al oficio de fabricar instrumentos de cerámica en forma autodidacta. Luego de terminar sus estudios de Diseño Industrial en la Universidad de Valparaíso, decidió imbuirse en este mundo e ir al rescate de la ocarina, que por esos días estaba casi extinta. Con este instrumento ha logrado gran reconocimiento y en 2008 su “Ocarina Quirquincho” le valió el Premio de Excelencia de la Unesco para los Productos Artesanales del Mercosur, un espaldarazo a su vocación y a la calidad de su trabajo.