AGRICULTORAS DE PUNTA ARENAS CONOCIERON EXPERIENCIAS EXITOSAS DE SUS PARES PEHUENCHES DE LONQUIMAY

Beneficiadas por INDAP llegaron hasta Lonquimay Y Durante la visita valoraron la participación, innovación y capacidad de gestión que tienen las agrupaciones agrícolas de la región de la Araucanía

Autor: Indap

Magallanes

El frío austral se abrazó con el frío cordillerano de Lonquimay y el “Mary Mary peñi”, bienvenida en mapudungún, siempre sonó cariñoso.  Así lo reconocen las cincos integrantes de la Agrupación de Mujeres Agricultoras  Tierra y Esfuerzo que viajaron hasta la región de la Araucanía a reunirse con sus pares.   

Fue un encuentro generoso que acortó los casi  2.500 kilómetros que separan a Punta Arenas de la pequeña localidad cordillerana,  un sector donde las bajas temperaturas pueden alcanzar incluso los 30 grados bajo cero.  Pese a la adversidad climática, los pequeños agricultores de la zona han logrado salir adelante y desarrollar una agricultura sostenida en el trabajo comunitario y solidario.   Una iniciativa que bien puede replicarse en Magallanes.

“Tenemos muchas cosas en común, como las difíciles condiciones climáticas, y la producción de sólo algunos meses.  Lo interesante es que las organizaciones han desarrollado en Lonquimay una producción en base al turismo y han logrado suplir los meses de baja agrícola, con artesanía y otras actividades.  Todo gracias al fortalecimiento de sus organizaciones y a la valoración de su cultura, adaptándose a la demanda turística de la zona, pero siempre preservando su identidad”, explicó Rocío Castro, ingeniera agrónoma, coordinadora del Programa de Desarrollo Local, Prodesal, de INDAP.

Durante el viaje de cinco días visitaron a la agrupación pehuenche “We Kuau Amuly”, la de Pedro Currillem, y visitaron las localidades de Curacautín, atravesando el túnel “Las Raíces” de 4.528 metros de longitud, construido entre 1930 y 1938, una obra que fue la más larga de Latinoamérica entre 1940 y 2006, hoy ocupa el segundo lugar.

“Queríamos conocer y visitar agrupaciones y comunidades mapuches, aprender de sus costumbres, y recoger experiencia.  Y todo fue un éxito, realmente nos sirvió mucho, todavía tenemos mucho que aprender”, valoró Erminia Nahuelquín, usuaria de Indap que participó del recorrido.

La Agrupación de Mujeres Agricultoras  Tierra y Esfuerzo fue beneficiada con fondos concursables  del Programa de Gestión y Soporte Organizacional, Progyso, de INDAP.  Esta iniciativa permite desarrollar capacitaciones y viajes con perspectivas de negocio a distintos lugares del país. En este caso, la inversión alcanzó los 2 millones de pesos.

Por su parte, el director regional de INDAP, Víctor Vargas, valoró el esfuerzo de los pequeños agricultores que concursan con proyectos que les permiten capacitarse a través del conocimiento en terreno y los instó a seguir fortaleciendo sus capacidades y competencias que van en beneficio directo de la agricultura y  la población de Magallanes. 

“Estamos dando respuesta a un requerimiento de las organizaciones del país y al compromiso de la Presidenta Michelle Bachelet de fortalecer las agrupaciones campesinas, con el fin de recomponer el tejido de las organizaciones y relevar su importancia histórica en el desarrollo del país. Valoramos a las organizaciones campesinas que entienden que la capacitación es la piedra angular del crecimiento colectivo y se esfuerzan por segur adelante, esta vez gracias a los proyectos Progyso, fondo que aporta en el desarrollo de las competencias de las organizaciones”, precisó Víctor Vargas.

Asimismo indicó que lo importante es construir de manera colectiva estrategias que permitan a los pequeños agricultores participar activamente en la búsqueda de un mejor negocio y bienestar familiar.

“Asociarse es sumar, añadir esfuerzos individuales a los logros colectivos. En el caso de la pequeña agricultora es más importante aún porque significa abrir los sueños y romper la vasija que limita el crecimiento económico. Hoy día, la acción que plantea INDAP, permite rescatar, acoger y dar vida, con el apoyo técnico y financiero a los sueños de nuestras organizaciones”, expresó.

Finalmente destacó que el programa Progyso beneficia a toda organización campesina que tenga personalidad jurídica sin fines de lucro y que reúna entre sus afiliados al 50% más de uno de usuarios actuales o potenciales de INDAP, así también que sus estatutos sociales apunten a objetivos análogos de INDAP.