Pequeños agricultores de San Juan de la Costa inician el período de siembra con rogativa mapuche

Autor: Indap

Los Lagos

Como una manera de apoyar las tradiciones del pueblo mapuche, el director de INDAP Los Lagos, Carlos Gómez; el jefe de Operaciones del servicio, Daniel Quiñelén; el jefe de la Agencia de Área de Osorno, Gonzalo Venegas, y el equipo técnico del Programa de Desarrollo Territorial Indígena (PDTI), acompañaron a los miembros de la comunidad Chain Ñuke Mapu, del sector Huitrapulli de la comuna de San Juan de la Costa, en una rogativa al Dios huilliche (efku al Chaotrokin) por su primera siembra de papa nativa morada de la temporada.

Carlos Gómez dijo que fue muy importante acompañar a la comunidad indígena en esta siembra de papa nativa, que se realiza los primeros días de agosto y da inicio a la temporada de cultivos en el territorio de San Juan de la Costa. “Es una siembra típica con bueyes, arado de tiro y también con una mezcla de fertilizantes, por lo tanto esperamos que, junto con una buena preparación de suelo, se dé también una buena cosecha a finales de diciembre”, expresó.

Añadió que “se vienen las lluvias y estamos en un momento en que no van a caer muchas heladas en la zona, y eso para el proceso es muy importante. Es un trabajo que esta comunidad ya conoce y que logra desarrollar de buena manera gracias a la asesoría permanente de los equipos técnicos del PDTI”.

Gómez también destacó que en la visita se incluyera al equipo regional de riego, para preparar al territorio en el futuro acceso al agua producto del cambio climático. “San Juan de la Costa es una comuna donde las fuentes de agua son escasas y hay poca agua subterránea a medida que nos alejamos del Valle Central. Entonces, las aguas superficiales que podamos captar son importantes para tener disponibilidad para regar en época estival y asegurar la producción”, señaló.

Imagen eliminada.

Carolina Catrilef, agricultora y miembro de la comunidad Chain Ñuke Mapu, destacó la siembra de papas en esta época y en laderas, ya que es ahí donde mejor se produce. “El tiempo de la papa morada es justo ahora, para que a fines de diciembre o principios de enero tengamos una buena cosecha. Este tiempo también es bueno para las arvejas y habas acá en la loma, para que no les afecten las heladas. En noviembre o diciembre se puede sembrar en las vegas, que son sectores que aún están muy húmedos”, dijo.

Contó que la siembra se inicia con una rogativa a la Madre Tierra (Ñuke Mapu), para pedir que la producción sea buena. “Esto lo hacemos para que no se pierda y trascienda en el tiempo, de tal forma de enseñarles a nuestros hijos a valorar lo que tienen, sobre todo la tierra, que es de lo que vivimos y la que nos da el sustento”, destacó la pequeña agricultora.