Chile destaca su inversión en Agricultura Familiar en seminario “Servicios Financieros Rurales”
Autor: Indap
Nacional
Conocer las formas de financiamiento de la Agricultura Familiar y analizar y sugerir iniciativas para hacer más equitativa la inversión en subsidios y créditos, fueron parte de los objetivos del seminario “Servicios Financieros Rurales”, que se desarrolló en el marco de la Reunión Especializada de Agricultura Familiar (REAF Mercosur) que se realiza en Olmué, con participación de representantes de organizaciones campesinas y entidades gubernamentales de Argentina, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay.
En la jornada participó el subdirector nacional de INDAP, Ricardo Vial, quién valoró la instancia y expuso sobre el Programa de Gestión y Soporte de Organizaciones (Progyso), destacando que “sólo en 2016 nuestra institución apoyó mediante esta herramienta a 248 organizaciones sociales con más de $1.322 millones, lo que refleja la importancia que tiene para este gobierno empoderar a las organizaciones campesinas a lo largo del país”.
Carlos Mermot, asesor del Programa FIDA Mercosur (Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola), dijo que la finalidad del encuentro fue mostrarles a los referentes de las organizaciones rurales y a los representantes de los gobiernos la figura de financiamiento de la Agricultura Familiar durante 2016: “Pusimos sobre la mesa los números más precisos posibles de cuál fue el nivel de presupuesto público que se asignó al sector, ya sea como crédito bancario, no bancario o subsidio. Lo que podemos rescatar es que durante el año pasado se invirtieron cerca de 8 mil millones de dólares para atender a unos 4,5 millones de agricultores entre estos cinco países, con un nivel medio de inversión por agricultor que ronda los 1.800 dólares al año, con un componente principal de crédito y uno secundario de subsidio como promedio de la región”.
Por otra lado, Mermot destacó que en este ámbito existen situaciones diversas en los países del sector: “En un extremo está Brasil, donde más del 90 por ciento de los recursos son transferidos como financiamiento bancario a través del Programa Nacional de Agricultura Familiar; una situación intermedia es lo que sucede en Paraguay y Chile, donde es bastante balanceada la proporción de crédito y subsidio, rondando el 50 por ciento cada uno; y una posición extrema es la que tienen tienen Uruguay y Argentina, donde los recursos no retornables transferidos a la Agricultura Familiar son más bajos ”.
Destacó que también hay algunas diferencias sobre el nivel de inversión medio por agricultor: “Hay casos destacados con inversiones superiores a 1.500 dólares, como Argentina, Brasil y Chile, y otros con niveles por debajo de los mil dólares, como Paraguay y Uruguay”.
Entre los participantes del seminario estuvo Marita Minetto, parte del equipo de extensión rural del municipio de Misiones, en el Estado de Río Grande, Brasil, que atiende a más de 3 mil familias campesinas: “Para nosotros es importante observar cómo se está trabajando con la Agricultura Familiar en otros países del Mercosur, porque así podemos estudiar las maneras diversas de aplicar los recursos financieros para el desarrollo de nuestras localidades”.